Mar
19
2019
Tomás Maza Ruiz, un cristiano de base de Madrid, publica hoy en ECLESALIA, esta sencilla y sensata reflexión que empieza con una clara (y olvidada) cita de Pablo. IV.
“El obispo debe ser intachable, fiel a su esposa, juicioso, equilibrado, bien educado, hospitalario, hábil para enseñar, no dado al vino ni amigo de reyertas, sino comprensivo, pacífico y desinteresado. Tiene que gobernar su propia casa y hacerse obedecer por sus hijos con dignidad. Uno que no sabe gobernar su casa y hacerse obedecer por sus hijos, ¿cómo va a cuidar de una asamblea de Dios” (1ª carta a Timoteo, 3, 2-6).