Desde hace años estos discursos anuales son síntesis de cómo ha vivido el papa el año que termina. Retransmitidos en directo se ha visto en años anteriores la incomodidad con que los cardenales recibían las palabras papales. El discurso de hoy era especialmente esperado. Y Francisco ha recurrido a David y Natán para expresar lo que sentía y denunciaba ante los escándalos que han conmovido a la Iglesia. Ofrecemos el texto completo que publica vatican.va. IV.

«La noche está avanzada, el día está cerca: dejemos, pues, las obras de las tinieblas y pongámonos las armas de la luz» (Rm 13,12).

Queridos hermanos y hermanas:

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